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El juego tiene la doble característica recreativa-pedagógica y esto lo hace un método sumamente rico cuando se habla de educación e infancia. Hoy día, es recurrente el uso de los videojuegos, es decir, jugar frente a la pantalla. Estos juegos presentan la posibilidad pedagógica pero por sus características (por ejemplo deformación de la realidad) es conveniente el acompañamiento del adulto que pueda aportar a la lectura de este juego.
Para ello, a continuación y a modo de ejemplo, se detalla posibles actividades a realizar con videojuegos de Bob Esponja, que ayudarán a los padres en este intento de prevenir riesgos y optimizar las potencialidades de este recurso tan utilizado por niños en la actualidad.
Objetivos:
- Encontrar en los videojuegos de Bob Esponja, sus potencialidades pedagógicas.
- Promover un espacio pedagógico de encuentro entre padres e hijos.
- Brindar herramientas para generar una visión crítica frente al videojuego.
Actividades con los padres:
- Leer la descripción sobre qué trata el juego.
- Identificar en esta lectura el espíritu del juego.
- Jugar el videojuego.
- En base a su experiencia de juego y a la lectura, identificar estereotipos presentes.
- Describir de qué modo se manifiestan estos estereotipos y cuál es su función en el juego.
- Identificar valores y antivalores presentes en el juego.
- Identificar las posibilidades que da el juego para trabajar la lateralidad, por ejemplo, a través de las flechitas del teclado.
Actividades para padres e hijos
- Buscar juntos, en Internet, información sobre Bob Esponja, de modo de poder contextualizar la dinámica del videojuego.
- Leer la descripción sobre qué trata el juego.
- Identificar en esta lectura el espíritu del juego.
- Jugar juntos el videojuego.
- Identificar estereotipos, valores y antivalores presentes en el juego.
- Durante el juego, incluir ejercicios de lateralidad.
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